Intervención Internacional

    El inicio de la guerra civil española solo aumento las tensiones a nivel europeo causadas por el reciente aumento de los gobiernos dictatoriales en Alemania e Italia y la voluntad de las democracias parlamentarias de Reino Unido, Francia y la Unión Soviética por frenar el poder de estos nuevos gobiernos. Se estaba iniciando en toda Europa un nuevo conflicto por la ideología y la política. El ambiente europeo se dividió entre los que mostraban su simpatía a los sublevados, realzándolos como una figura en contra del comunismo, y los que apoyaban a la República que se veía como una fuerza opuesta al fascismo.

EL COMITÉ DE NO INTERVENCIÓN

   Aunque parecía que la República iba a obtener ayuda de las demás democracias como la del gobierno francés de Léon Blum, los sectores conservadores ingleses y franceses presionaron a los estados, que se vieron obligados a optar por una política neutral. Esta neutralidad se vio marcada por el miedo a romper el fino equilibrio que mantenía a las democracias en el poder y la voluntad de evitar una posible guerra en Europa. No obstante su que hubo tráfico de armas Francia-España.

No fue hasta 1936 que se creó en Londres el Comité de No Intervención que contaba con más de 27 países, los cuales decidieron no tener ningún contacto político o comercial con España y la mediación de la Sociedad de Naciones. A pesar de esto Alemania, Italia y Portugal ayudaron a España.

Estados Unido denegó la exportación de armas a la España republicana, pero proporciono suministros de petróleos y vehículos, de empresas privadas, a los sublevados.
 

Ayuda a los sublevados

   La principal ayuda militar de España vino desde Alemania por parte de Hitler, esta ayuda fue constante hasta el final de la guerra. Sin embargo tuvo que ser enmascarada con viajes de comercio para evitar problemas internacionales. También proporcionaron ayuda naval y suplementos de artillería. Por ello se crea la Legión Cóndor definitiva para la victoria nacional en la guerra. El coste de esta ayuda tuvo que ser devuelto en forma de alimentos y otros productos.

Italia también proporcionó tropas, como el CTV, armamento y flota naval. Portugal por su parte facilitó las comunicaciones en su territorio y el uso de los puertos como puntos estratégicos. También envió a unos 20.000 hombre. Todo esto unido al ejército de África formado por mercenarios y dirigido por oficiales nacionales.

Ayuda a los republicanos

    La única ayuda importante fue la Unión Soviética que envió armamento, alimentos y algunos técnicos, traductores y pilotos que ayudaran en la estrategia. Esta ayuda fue muy útil en el freno de la ofensiva franquista en Madrid, Teruel y el Ebro. Esta ayuda fue pagada con fondos del banco de España.

Por otra parte tenemos las Brigadas Internacionales, compuestas por soldados de vario países que ayudaron a los republicanos. Estas brigadas ayudaron a frenar el avance fascista; vinieron de todas partes de Europa ante la llamada a las organizaciones de izquierdas, sobre todo la Internacional comunista. Fue muy importante en Madrid y Guadalajara.